Estáis en el concierto, con la música metida hasta las entrañas. Está siendo impresionante, sientes la borrachera estética, las emociones a flor de piel…

Te sientes a gusto con Jo, aunque de vez en cuando te acuerdas de que es un robot. Necesitas un poco de tiempo para acostumbrarte, quieres ir lento en esta relación. Al acabar el concierto os vais a picar algo, os dais unos ricos besos y os despedís.

Cuando te metes en tu cama, te invade una sensación extraña. Sientes una especie de tristeza, y un miedo intenso. Estás confusa. Nunca has sentido nada parecido. Te da mala espina, no puedes dormir. Coges el ordenador y metes esta búsqueda en tu bibliografía de psicología: “Smart depression síntomas”. Pasas toda la noche leyendo, te duermes al amanecer.